Los evaporadores EVALED® aprovechan un fenómeno natural: la evaporación. Fueron creados hace treinta y cinco años, a partir de una intuición visionaria, que ha demostrado cómo la aceleración de dicho fenómeno, gracias al uso de unidades modulares estándar, represente un “sistema limpio” para separar el agua de las sustancias contaminantes con una temperatura de ebullición más alta.

¿QUÉ ES LA EVAPORACIÓN?
Es el pasaje del estado líquido al gaseoso relacionado solo con la superficie del líquido. Si se supera la temperatura de ebullición (diferente para cada líquido y relacionada con la presión) tienen lugar el proceso de ebullición, caracterizado por temperatura y parámetros de presión constantes. Los dos procesos se definen vaporización.

¿QUÉ ES EL CALOR LATENTE DEL AGUA?
Para llegar a este paso es necesario ante todo suministrar calor (energía). La cantidad necesaria para que se realice el pasaje de estado, definido calor latente de evaporación, depende del tipo de líquido, de su masa y de su temperatura. Por ejemplo, para un kg de agua a 373 K (100 °C), el calor latente es igual a 2300 kJ aproximadamente (550 kcal, 640 Wh) a presión atmosférica (alrededor de 100 kPa).

La misma cantidad de calor la libera el agua durante la fase de vapor, cuando tiene lugar el fenómeno de la condensación.

¿QUÉ ES EL PUNTO DE EBULLICIÓN?
Corresponde a la temperatura a la cual la presión del vapor se equivale a la presión externa, de esta manera la vaporización se realiza de forma tumultuosa (ebullición), para no actuar solo sobre la superficie del líquido, sino sobre toda la masa.

El punto de ebullición depende del tipo de líquido y cambia en función de la presión. El del agua es a 373 K (100 °C) a una presión atmosférica de 100 kPa aproximadamente. Sin embargo, con altitudes elevadas, como por ejemplo, en la cima de una montaña, donde el valor de la presión es inferior al detectado en el nivel del mar, el agua hierve a una temperatura menor. Por tanto, cuando la presión es muy baja (vacío) y es igual a alrededor de 4 kPa (40 mbar), la temperatura de ebullición se alcanza a 302 K (29 °C).

Los líquidos diferentes tienen puntos de ebullición diferentes: el alcohol etílico, por ejemplo, tiene un punto de ebullición igual a 351,4 K (78,4 °C) a 75 kPa (760 mbar).

¿QUÉ ES EL AUMENTO EBULLOSCÓPICO?
En el caso de soluciones salinas, la temperatura de ebullición, a una presión constante, cambia en base a la presencia de sales y a su concentración. El aumento ebulloscópico es la diferencia entre las temperaturas de ebullición del agua y la de una solución con una concentración fija de sales. Por ejemplo, la temperatura de ebullición de una solución acuosa de NaCl al 35% p/p a presión atmosférica presenta un aumento de la temperatura de ebullición de 10 K (a 37 °C).